Te fuiste
Te desvaneciste el noviembre pasado cuando los aires de esperanza volvían a nuestras almas. Ya estábamos distanciados, aún así lloré por tu salud, me rompiste el corazón al enfermarte. Te quise de única manera y tu amor me hizo fuerte. No pudimos amarnos como queríamos, pues estaba prohibido. Nos mirábamos y nos derretíamos tan encendidos, tan lujuriosos. Tu amor me rejuveneció, sentía que mi piel era de oro. Brillaba sólo ante tu mirada. Mi amor, te desvaneciste fugazmente, sin que viviéramos todo lo que soñamos. Te apagaste sin aviso, sin un adiós, sin que pueda acariciar tu tersa piel, sin que pueda besar tus labios de almendra. Te extraño todos los días, mi teclado te escribe en este espacio porque sé que desde el cielo me lees.